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domingo, 21 de noviembre de 2021

EFECTO DE LA EXPOSICIÓN A LA RADIACIÓN DE TELÉFONOS MÓVILES DE 2400 MHZ SOBRE EL COMPORTAMIENTO DEL HIPOCAMPO CON RATONES ALBINOS

EFECTO DE  LA EXPOSICIÓN A LA RADIACIÓN DE TELÉFONOS MÓVILES DE 2400 MHZ SOBRE EL COMPORTAMIENTO DEL HIPOCAMPO CON RATONES ALBINOS

La exposición a la radiación de teléfonos móviles de 2400 MHz sobre el comportamiento y la morfología del hipocampo en un modelo con ratones albinos machos suizos

Investigación realizada en:

Departamento de Anatomía e Histología - Facultad de Ciencias Veterinarias de la  Universidad Agrícola de Bangladesh

División de Neuroanatomía - Departamento de Neurociencia de la  Facultad de Medicina de la Universidad de Yamaguchi - Japón

1. Introducción

Los teléfonos celulares irradian  una radiación electromagnética de radiofrecuencia – campos electromagnéticos a su alrededor, los que podrían tener una  consecuencias negativas para la salud. La exposición a los campos electromagnéticos puede contribuir a alteraciones neurológicas y fisiológicas y anomalías del comportamiento en adolescentes y adultos jóvenes. La radiación emitida por el teléfono móvil no solo daña el cerebro y genera un deterioro cognitivo y conductual. Se han realizado numerosas investigaciones experimentales sobre el impacto de los campos electromagnéticos (CEM) en el cerebro y el sistema nervioso. Durante la conversación con teléfonos móviles, la gente suele acercarse el móvil a la cabeza. Como resultado, el cerebro está más expuesto a la radiación que cualquier otra parte del cuerpo.

El rango de frecuencia de los campos electromagnéticos  de los teléfonos móviles que utilizan el sistema Global System for Mobile Communication (GSM) es de 300 MHz (MHz) a 300 GHz  (GHz). Los teléfonos inteligentes funcionan en la frecuencia de 900 a 2600 MHz en todo el mundo. En nuestro estudio, los ratones machos estuvieron expuestos de frecuencia de 2400 MHz.

Hallazgos anteriores han demostrado que el estrés oxidativo responde a la exposición a los campos electromagnéticos. Los oxidantes podrían interrumpir la actividad enzimática de la membrana celular, alterar las actividades celulares y quizás conducir  a  la  muerte celular. Los trastornos conductuales y cognitivos más notables del sistema nervioso central identificados tanto en personas como en animales con respecto a la exposición a la radiación de teléfonos inteligentes a largo plazo. De hecho, se ha documentado que la exposición a los campos electromagnéticos (CEM) tiene una variedad de consecuencias neurológicas). Muchas investigaciones se centraron en problemas de comportamiento causados ​​por la exposición, incluida la pérdida de aprendizaje y memoria en ratas. Informaron que la exposición de campos electromagnéticos baja frecuencia afecta la memoria espacial y coloca tareas de aprendizaje en roedores a través de laberintos de agua o laberintos de brazos radiales.

Estos hallazgos sugieren que las personas no tienen conciencia de las consecuencias de los campos electromagnéticos debido al uso excesivo de los teléfonos móviles. La exposición tiene muchos efectos reversibles o permanentes sobre el tejido nervioso. No se han realizado estudios a largo plazo sobre las consecuencias de la exposición a la radiación de los teléfonos móviles de cuarta generación (4G – 5G) de 2400 MHz en el sistema nervioso. Por lo tanto, este estudio se ha realizado para explorar y evaluar el impacto de los campos electromagnéticos  4G de 2400 MHz de un teléfono celular en el cerebro de modelos de ratones, con especial atención a la morfología del hipocampo



2. Materiales y metodología.

2.1 Procedimientos que involucran animales y ética: El estudio se llevó a cabo en el Departamento de Anatomía e Histología de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Bangladesh; con ratones albinos machos suizos sanos (6 semanas de edad)

El estudio se llevó a cabo en el Departamento de Anatomía e Histología de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Bangladesh. Este estudio fue aprobado por el Comité de Ética Animal de la Universidad Agrícola de Bangladesh (AWEEC / BAU / 2019–46). El Centro Internacional para la Investigación de Enfermedades Diarreicas (ICDDRB), Mohakhali, Dhaka, suministró ratones albinos machos suizos sanos (6 semanas de edad). En el momento de la recolección, el peso físico promedio de los ratones fue de 29 ± 5 g.

Los ratones se alojaron en jaulas de plástico de 52 cm × 36 cm × 25 cm en un entorno de temperatura regulada (24 ± 2 ° C) con un ciclo de 12 horas de luz y 12 horas de oscuridad, 40 por ciento de humedad, alimentación regular y agua potable ad libitum  

2.2. Grupos de experimento

Se realizó en tres grupos

En este estudio se utilizaron treinta ratones machos. Los ratones se clasificaron en tres grupos (Grupos I, II y III) después de una semana de aclimatación; cada grupo contenía diez ratones (n = 10). Los pesos corporales se documentaron antes de que comenzara la exposición a la radiación de los campos electromagnéticos: Se consideró que

El Grupo I controlaba los ratones alimentados con  dieta estándar y agua potable fresca ad libitum sin exposición a la radiación.

Grupo II: los ratones se expusieron a los campos electromagnéticos  modulada 4G de 2400 MHz durante 40 min / día durante dos meses.

Grupo III: Se expuso a los ratones a los campos electromagnéticos de radiofrecuencia modulada 4G de 2400 MHz durante 60 min / día durante dos meses, simultáneamente. Cada grupo se mantuvo en una jaula de plástico rectangular encerrada en una malla de alambre compartimentada.

2.3. Estudio de comportamiento

El laberinto elevado (EPM) es un método para evaluar respuestas similares al miedo y la ansiedad en ratones en función de su preferencia natural por áreas abiertas y elevadas. En nuestro estudio, la estructura de El laberinto elevado (EPM) se realizó con madera que consta de cuatro brazos (50 cm de largo × 5 cm de ancho) unidos al pilar central (5 cm × 5 cm): vallas de 40 cm de alto en brazos cerrados pero brazos abiertos tienen ahora todo. El laberinto tiene cuatro patas a 70 cm del suelo. Los ratones pueden acceder a todos los brazos y caminar libremente alrededor de ellos. Los brazos cerrados, por lo tanto, dieron a los animales una zona segura. Sobre el laberinto se instaló una cámara de video y detrás de una cortina blanca se colocó un monitor. La sala de pruebas constaba de un gran laboratorio sin instalaciones de atenuación del sonido. Después de dos meses de exposición, se probaron todos los ratones. En el momento de la prueba de comportamiento, los ratones individuales se pesaron diariamente. Los ratones estaban familiarizados con la sala de examen media hora antes del examen de comportamiento. La evaluación del comportamiento se realizó en una habitación roja luminosa. En la plaza central, los ratones se colocaron con un brazo abierto y se les permitió explorar el laberinto durante cinco minutos; después de eso, el ratón fue llevado del laberinto a su jaula.

Antes de probar un nuevo ratón, se limpió el aparato de EPM con alcohol al 20 por ciento para eliminar cualquier índice de olor pútrido. El movimiento y otras actividades de comportamiento de cada ratón en el EPM se registraron utilizando una cámara de video que luego se analizó utilizando el programa de seguimiento automático Ethovision XT versión 10.1 ( Fig.1A). El número de entradas con los brazos abiertos y cerrados y el tiempo que pasaron con los brazos abiertos se consideraron indicadores de miedo y comportamiento similar a la ansiedad. Cuando el ratón había alcanzado por completo el brazo (4 patas en el brazo), contaba una entrada en un brazo en particular. La frecuencia de las entradas con los brazos abiertos y cerrados, así como la cantidad de tiempo que pasaron con los brazos abiertos y cerrados, así como el número de movimientos de cabeza (el ratón bajó la cabeza hacia el suelo sobre los lados del brazo abierto) y alza ( ratón de pie sobre las patas traseras con las patas delanteras contra las paredes del laberinto) se calcularon y registraron los comportamientos a partir del laberinto en cruz. El aumento en el número de ratones que ingresan y la duración de la estadía en los brazos abiertos se consideró un indicador de reducción de la ansiedad. Los ratones se sacrificaron después de la prueba de comportamiento, y el tejido cerebral se recogió y se separó del hipocampo para el estudio histopatológico después de la fijación de perfusión adecuada.

Los teléfonos móviles con frecuencias que van de 900 a 1800 MHz han sido más populares durante las últimas dos décadas. Estas frecuencias pueden tener muchos efectos adversos en los sistemas biológicos. Hallazgos anteriores han demostrado que la radiación móvil puede causar ROS en diferentes tejidos. La producción excesiva de especie reactiva de oxígeno (ROS) puede inducir estrés oxidativo e inflamación, lo que resulta en cambios en los mecanismos de defensa antioxidantes, así como estrés oxidativo. Muchos estudios han demostrado que la radiación electromagnética puede causar daño oxidativo a los tejidos. Aumento de las concentraciones de enzimas antioxidantes, catalasa, y la superóxido dismutasa puede ayudar a evaluar la correlación entre apoptosis y radiación. El hipocampo regula ciertas funciones cognitivas y conductuales que incluyen retener información durante el proceso de aprendizaje. Hubo una disposición anormal de neuronas y una reducción en las neuronas granulares viables normales y piramidales en el hipocampo debido a la exposición a la radiación. Investigadores anteriores han informado resultados similares con un fuerte apoyo a estos hallazgos. Nuestros hallazgos estereológicos e histopatológicos mostraron un cambio significativo en el hipocampo de los ratones expuestos a radiación electromagnética consistente con los hallazgos del estudio de comportamiento. 

El resultado sugirió que el comportamiento similar a la ansiedad estaba influenciado por la radiación electromagnética. La generalización de los efectos de los experimentos con ratones en seres humanos todavía está en duda. Este estudio, realizado utilizando la frecuencia de 2400 MHz, comúnmente utilizada hoy en muchos países para la comunicación celular, contribuiría significativamente a la literatura sobre las consecuencias del uso prolongado de teléfonos celulares en los tejidos vivos. 

 3. Conclusión

Nuestro estudio actual sugiere que la exposición a largo plazo a la radiación de los teléfonos móviles 4G tiene efectos perjudiciales sobre el comportamiento similar a la ansiedad y cambios en la arquitectura morfológica del hipocampo. El tipo de daño neuronal discutido aquí no tiene resultados demostrables inmediatos. Sin embargo, puede conducir a una disminución de la capacidad de reserva cerebral a largo plazo, lo que podría descubrirse en otras enfermedades neuronales tardías. Sin embargo, se requieren experimentos más detallados que utilicen diferentes enfoques (como microscopía electrónica, autorradiografía, ensayo TUNNEL e inmunohistoquímica) para determinar si dichas alteraciones patológicas se invierten o persisten para llegar a una conclusión satisfactoria a este respecto.  nuestros resultados actuales podrían servir como datos primarios para estudios más exhaustivos sobre los efectos de la radiación de los teléfonos móviles 4G en el cerebro.

FUENTE:

https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1319562X21007518

 


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